Hemos aprendido a
volar como las aves, a nadar
Como los peces,
pero no hemos aprendido
El arte de vivir
como hermanos.
Martin Luther King,
Constantemente
nos llenamos de prejuicios absurdos, de inconformidades, de miedos, dudas y
rencores que hacen que nuestra convivencia se convierta en un arte, lo cual no debería
ser así, desde que nacemos estamos rodeados de personas que nos quieren y
cuidan y estamos en una continua comunicación, pero vamos creciendo y nos
enfocamos solo en nuestras necesidades, lo que no está del todo mal, se
convierte en algo malo cuando esas necesidades propias aíslan a los que nos
rodean, cuando esa necesidad se ha convertido en prejuicio el cual va haciendo
de nosotros personas intolerantes, cuando nuestras inconformidades se reflejan
en nuestras actitudes, miedos y rencores,
y nos descargamos con quienes no tienen
la culpa.
Convivir, una
tarea casi imposible de armonizar las diferentes formas de entender el mundo y
lo compleja que acostumbran a ser las relaciones entre los seres humanos.
Convivir es algo
que debe ser innato y mirándolo bien, así es; pero han habido cambios sociales
y sus transiciones que no han sido satisfactorias, en medio de estas brechas; nacen rebeldes, antisociales, críticos
destructivos, y todo apuntando hacia lo mismo, la falta de tolerancia, ese
respeto por el otro en su opinión, forma de ser, forma de vestir, forma de
hablar, en sus creencias y sobretodo en este país, donde la gran mayoría se creen
más que los demás; el que tiene el arma tiene el poder, el que tiene el dinero
tiene el poder, el mas “AVISPADO” tiene el poder; conociendo que desde nuestra
historia el que tiene el conocimiento tiene el poder. Desde hace miles de años, han desconfiado de
las tribus vecinas y han considerado peligrosos a los habitantes de tierras
lejanas o que tiene diferente color de piel, o diferentes costumbres, todo
aquellos que no pensaba igual o se viera diferente eran llamados “los otros”
Pero no se trata
de quien tiene que, es más una habilidad, destreza, inteligencia, en la forma
en cómo se integra a un grupo y como se vincula a la sociedad, llámese
habilidades sociales, destrezas en la comunicación, proceso de interacción;
todo indica que la persona que posea estas facultades le es más fácil
integrarse a determinado grupo, comunidad, y la sociedad misma.
Se dice que una persona posee una habilidad social
cuando es capaz de aplicar o
ejecutar una conducta pero también con
un intercambio, obteniendo resultados positivos, se debe resaltar las personas
que posean esta habilidad ya que las sociedades actuales involucran a cada
individuo en un constante proceso de adaptarse, des adaptarse, readaptarse; confirmando que los seres humanos que la
posean son personas con una autoestima alta, constante y con una clara visión
de la vida, la meta propuesta, del deseo de seguir superándose tanto personal
como profesional y con una estructura en su personalidad que le haga
autoevaluarse para generar cambios o aplicar las cosas de otra forma. Para
que una persona desarrolle estas
habilidades se debe hacer un buen trabajo con ella desde su niñez y la primera
en formar, darle herramientas, orientarla, es la familia, la cual está
organizada como un sistema y se involucra en la sociedad como comunidad, donde
todo está organizado por un gobernante o un líder, como siempre se ha venido
haciendo en la evolución humana, porque si es verdad que se posee habilidades,
pero siempre se tendrá la necesidad de una persona que dirija para que hayan un
orden, y dentro de la sociedad todo está organizado por un sistema que está
compuesto por empresas de diferentes tipos, servicios, y dentro de cada una de
ellas una estructura mostrando que todo es un diseño para que alguien lidere, y
lo más posible es alguien con una habilidad social.
Y todo esto lo
logramos saber gracias a las investigaciones que se llevan a cabo sobre todo
con un el enfoque cualitativo, el cual
tiene diferentes tipos que nos ayudan a dar datos precisos y con propuesta
mejoradoras para aplicarlas en nuestro sistema.
MARTHA LUCIA CORTES SANCHEZ